En verdad existen momentos en que todos nos sentimos incómodos al intentar comenzar una conversación casual con alguien a quien no conocemos. Aquí les pasamos unos tips para que esta situación no sea tan incómoda:
- Comienza la plática con cualquier cosa que tengan en común. Esto puede ser amigos, jefes, ciudades de procedencia, etc.
- Haz preguntas acerca de la vida de la otra persona, de su trabajo, hobbies o cualquier tema actual de la cultura pop. Estos temas son buenos para iniciar una conversación. Puedes comenzar por preguntar como: ¿Qué piensas de…?, ¿Escuchaste que…?, ¿Qué opinión tienes acerca de…?, etc. Intenta alejarte de temas negativos o historias que sepas que tomarán un largo tiempo.
- Si comienzas a aburrirte con la plática, deja de hablar, reconoce la situación y cambia de tema.
- Escucha más de lo que hablas (si solo aprendes algo de esta lista debería ser este punto).
- Cuando comiences conversaciones con personas que nunca habías visto, limita tu plática a lo más reciente en tu vida. Temas casuales acerca de lo que tienen alrededor en ese momento como por ejemplo: la música que se escucha o las bebidas que se están dando en ese evento.
- Es una buena idea conocer un par de datos históricos interesantes, por ejemplo “¿Sabías que Albert Einstein hablaba muy poco de niño? Cuando lo hacía hablaba lento y en muy bajo volumen hasta cuando tenía 9 años que decidió decirle a sus padres ‘ésta sopa está muy caliente’ los padres sorprendidos le preguntaron ‘¿Por qué no hablabas hasta ahora?’ a lo que el respondió ‘hasta ahora todo estaba funcionando de manera correcta.'”
- Al mismo tiempo recuerda que no a todos les cae bien una persona que parece saberlo todo (nadie).
- Las pausas prolongadas en la conversación son el momento ideal para lanzar uno de estos datos históricos interesantes. La mayoría de las personas prefieren escuchar este tipo de historias a mantener un incómodo silencio.
- Fíjate en tu lenguaje corporal, intenta demostrar confianza y comodidad en tu persona, incluso cuando no sea así.
- Deja que los extraños te interrumpan, esto no quiere decir que están siendo groseros contigo, de hecho es una buena señal, ya que están participando y poniendo atención a la plática que tienes con ellos.
- Cuando todo falla simplemente habla del clima.
- Siempre ten lista una salida o escapatoria para una conversación que no está funcionando, por ejemplo puedes decir: “Un momento por favor, voy a saludar a un amigo”, “Terminó mi hora de comida, me tengo que ir, hasta luego”, etc.
Por último, te recomendamos que siempre que comiences pláticas con extraños evites temas como: religión, política o temas personales, esto al menos las primeras veces que ves a una persona y pasa de extraño a conocido y de ahí a un nuevo amigo.
¿Tienes alguna experiencia interesante platicando con extraños? Comparte con nosotros en los comentarios.